En estados
con un elemento de teocracia, esto puede afectar el
título de príncipe en varias formas, como el tratamiento del gobernante (por
ejemplo, con un título secundario como “hijo” o “sirviente” de una divinidad nombrada)
y también el modo de sucesión (incluso reencarnación y reconocimiento). Además,
ciertos oficios religiosos pueden ser considerados de rango principesco y/o
implicar derechos temporales comparables.
Armas de Friedrich Johannes Jacob Celestin Cardinal
von Schwarzenberg, Arzobispo de Salzburgo (1835-1850 y Arzobispo de Praga
(1850-1885)
Los Papas, Cardenales, Príncipes-obispos, Lores-Obispos,
Príncipes-prebostes y Príncipes-abades son referidos como Príncipes de la
Iglesia. También en el cristianismo, Jesucristo es muchas veces referido como
el Príncipe de la Paz, Príncipe de
Príncipes, Príncipe de la Alianza y Príncipe
de los Reyes de la Tierra. Además, Satán es a menudo titulado Príncipe de la Oscuridad y en la fe
cristiana también es referido como Príncipe
de este Mundo y Príncipe del Poder
del Aire. Otro título para Satán, no muy común hoy pero sí aproximadamente
en el 30 A. D. por los fariseos de la época, fue el de Príncipe de los Demonios. El Arcángel Miguel ha sido llamado Príncipe de Israel, Príncipe de los Ángeles
y Príncipe de la Luz. Algunas
iglesias cristianas también creen que, desde que todos los cristianos, como
Jesucristo, son hijos de Dios, entonces también son príncipes y princesas del Cielo. San Pedro, un discípulo de Jesús,
es conocido como el Príncipe de los
Apóstoles.
Príncipe
de la Iglesia
El término Príncipe de la Iglesia se utiliza casi exclusivamente para los Cardenales católicos. Sin
embargo el término es históricamente más importante como un término genérico
para los clérigos cuyos oficios tienen el rango secular y el privilegio de
un príncipe (en el sentido más amplio) o son considerados su
equivalente. En el caso de los Cardenales, siempre son tratados en
protocolo como equivalentes a los príncipes reales.
Regalía completa de un Cardenal
Por
analogía con los príncipes seculares, en el sentido amplio de
gobernante de cualquier principado sin importar el tratamiento, adquirió
perfecto sentido en una sociedad de clases feudal
considerar a los más altos
miembros de la clerecía, sobre todo los prelados, como una clase
privilegiada ("estamento") similar a la nobleza, situándose
justo por debajo o incluso por encima de ésta en el orden social. A menudo
altas filas clericales, tal como obispos, tenían alta precedencia
protocolaria entre la nobleza y asientos en las asambleas más altas, incluidos
los tribunales de justicia y las legislaturas, tales como Lores-Obispos en la Cámara de los Lores inglesa
(y más tarde británica) y Príncipes primados en el Reino de Hungría.
En Europa, como se convirtió en costumbre para
los hijos menores de las casas dinásticas buscar carreras en la jerarquía de la
iglesia, especialmente cuando estaban excluidos de la sucesión, los miembros de
familias reales y la aristocracia comenzaron
a ocupar muchas de las más altas prelaturas; ejemplos incluyen Henry, Cardenal-Duque de York , el
segundo nieto de Jacobo II de Inglaterra , y Henry, Cardenal-Rey de Portugal,
quinto hijo de Manuel I de Portugal .Incluso
los Papas crearon abiertamente Cardenales-nepotes entre su propia familia. Sin embargo, se trata de casos
individuales; el término Príncipe de la Iglesia no se aplica a los siguientes casos
institucionalizados.
Ferdinando I de'
Medici, Gran Duque de Toscana, Cardinale
della corona de España de 1582 a 1584
Clérigos
europeos como príncipes territoriales
Especialmente en el Sacro Imperio Romano Germánico,
un gran número de Príncipes-obispos, Príncipes-arzobispos y
superiores del clero regular (sobre todo Príncipes-abades,
pero también abadesas, Príncipes-prebostes y Gran
maestres) obtuvieron sus sedes, coincidiendo con el cargo eclesiástico, uno o
más estados seculares feudales de varios estatus e importancia (desde pequeños
señoríos a principados relativamente grandes, como los ducados), que serían a
menudo hereditarios. En otros casos, territorios fueron especialmente labrados por
una autoridad superior, tal como el imperio, sobre todo para una (arqui) diócesis
o monasterio, bajo nombres tales como Stift en alemán (en el caso de una diócesis Hochstift , para una arquidiócesis más Erzstift)
o en holandés Sticht, ambos significando “fundación”,
por ejemplo, para establecer un pariente cercano como su primer prelado;
ocasionalmente un principado normal de estilo secular era creado, pero inmediatamente
era concedido a un prelado, como el ducado de Westfalia para el Arzobispo
y Príncipe-elector de Colonia.
A
muchos de ellos en algún momento les fue otorgado formalmente el rango de Reichsfürst, literalmente, "Príncipe
del Imperio", que en sí mismo les daba derecho a representación en el Reichstag (Dieta Imperial). Por ejemplo, el obispo de Lieja era Fürst a causa de varios
principados seculares fusionados en el obispado (incluyendo los condados de Loon/Looz y Ho (o)rn, el
marquesado
de Franchimont y el ducado de Bouillon) gobernando una
vasta área. El príncipe –obispado era mucho más pequeño que su diócesis
eclesiástica. En la época feudal este territorio era la única parte de los Países Bajos que
no
se contaba entre las "Diecisiete Provincias", pero visto como una
parte integral de Alemania.
Ernst von Bayern (1554-1612), Arzobispo de Colonia,
Príncipe-Obispo de Lieja, Príncipe-Obispo de Münster
Sin
embargo, los principados de algunos de los más altos prelados no eran conocidos
como príncipe-obispados, lo que efectivamente eran, sino más bien por un
término que correspondía a un rango de mayor prestigio eclesial o temporal: los
tres arzobispados alemanes de Príncipes-electores (Colonia, Maguncia y
Tréveris) eran tratados Kurfürstentum "Electorado";
el patriarcado (un arzobispado) de Aquileia sólo eso; el (Arzo) Obispo de los
principados italianos de Roma, el Estado Pontificio (s); por otro lado el
principado papal en Francia, el Condado Venaissin, donde el Papado
había residido en el 'exilio babilónico" en Avignon, pero que
seguía siendo un estado papal, separado de los estados italianos, era conocido
simplemente por su condición temporal, no refiriéndose al más alto de todos los
príncipes de la Iglesia.
Una
categoría exclusivamente religiosa de príncipes eran los Gran Maestres, por tratamientos
algo diferentes, de esas órdenes militares a
las que
se había otorgado la condición de Estado sobre un territorio para defenderla
contra los infieles y/o en reconocimiento del mérito militar de la orden en
cruzadas y conquistas, en particular contra pueblos (eslavos y bálticos) del norte y
el este – el Estado de la Orden Teutónica se convirtió en la gran
potencia en la región del Báltico, por ejemplo, absorbiendo sus homólogos-y
contra los moros musulmanes en la Península Ibérica. Mientras que los Gran maestres
y sus caballeros guerreros solían ser nobles profesos, las
órdenes incluían miembros del clero y eran un conjunto reconocido como una
verdadera forma "militante" de devoción con reconocimiento papal como
una orden monástica normal. Un ejemplo existente sería el de la Soberana Orden Militar
de Malta.
Archiduque Maximilian Franz de Austria (1756-1801), Gran Maestre de los
Caballeros Teutónicos y Arzobispo-Elector de Colonia en 1784.
En el siglo XX y el XXI sólo el Obispo de Roma (el Papa,
como Monarca Soberano de la Ciudad del Vaticano, anteriormente de
los Estados Pontificios, una gran
potencia en la península italiana hasta 1870) y el Obispo de Urgell (como co-Príncipe de Andorra)
están todavía reinando, "príncipes de la Iglesia" territoriales. Para todos los otros clérigos como príncipes
el poder mundano es hoy considerado como incompatible con las prescripciones de
la iglesia.
Cada cardenal de la Iglesia Católica Romana es todavía llamado un Príncipe de la Iglesia porque su Colegio de Cardenales elige a un nuevo Papa (de facto desde su grupo) durante un
período de sede vacante en una sesión especial llamada Cónclave, donde se
aplica un límite de edad. Los
Cardenales así son un equivalente eclesiástico de los Príncipes-electores del antiguo Sacro Imperio Romano,
la otra gran monarquía electiva.
Uso
informal y contrapartes
Informalmente, los demás miembros de las
altas esferas jerárquicas de la Iglesia Católica son en tiempos recientes
también llamados ocasionalmente "Príncipes de la Iglesia", en cuyo
caso este título en ocasiones puede llevar connotaciones irónicas.
Para puestos análogos en iglesias no
católicas y especialmente en contextos no cristianos, es usado el término Príncipe
de la Fe.
Brahmanes hindúes
En regiones
hindúes de la India,
la casta sacerdotal de los brahmanes tiene mayor
jerarquía que la casta noble de los chatrias.
Como resultado, los príncipes de la Fe pueden ser considerados los superiores de jure de los príncipes de la sangre. Sin embargo, los dos
grupos a menudo competían entre sí por la soberanía
de facto y algunas figuras históricas en la historia de la India han
llevado tanto los títulos sagrados y como los seculares. Como el poder real por lo general
recae en los gobernantes seculares, muchos brahmanes buscan la promoción
social, sirviendo ellos, por ejemplo, como asesores espirituales de la corte, e
incluso con potencias coloniales ocupantes
(no hindúes), a menudo en posiciones administrativas donde sus
cualidades intelectuales se podrían aprovechar.
Príncipe-primado
Príncipe-primado (Fürstprimas en alemán, Hercegprímás en húngaro) es un
raro título principesco poseído por
(príncipes) arzobispos
individuales de sedes
específicas, en su capacidad de presidente en una asamblea augusta de príncipes
seculares principales.
El Rheinbund o Confederación del Rin fue
fundada en 1806, cuando varios estados alemanes se separaron del Sacro Imperio Romano y se aliaron con el
emperador Napoleón I de Francia, quien asumió la posición de protector de la Confederación. Su cargo más alto
estaba en manos de Karl Theodor von Dalberg, primer Arzobispo de Maguncia y después de Ratisbona, que había
sido el primero entre los príncipes del Sacro Imperio Romano y era tratado como
su Archicanciller.
A él se le dio el primer puesto entre los príncipes de la nueva Confederación y
el título de Fürstprimas, 'Príncipe Primado’. Como tal, presidió el Colegio de los Reyes y la Dieta de la
Confederación,
una asamblea parecida a un senado, la cual en realidad nunca se reunió. En 1810 fue promovido
al rango estrictamente secular de Gran Duque de Frankfort. Al
mismo tiempo, Napoleón nombró a su hijastro Eugène de Beauharnais -excluido
de la sucesión imperial francesa-como heredero del Gran Ducado.
Karl Theodor
Anton Maria von Dalberg (1744 - 1817) fue Arzobispo y Elector de Maguncia, Archicanciller
del Sacro Imperio Romano
Germánico, Príncipe
de Ratisbona, Primado de la Confederación del Rin y Gran
Duque de Frankfort.
En la víspera de la caída del imperio
napoleónico, Dalberg renunció a sus posiciones seculares y Beauharnais le
sucedió como Gran Duque, aunque esto no tuvo ningún efecto práctico, puesto que
la disolución de la Confederación (repartida en un conjunto revisado de
monarquías), también devolvió la
discutible posición.
Hungría
En virtud de su dignidad como Primado del Reino Apostólico de Hungría
(Habsburgo), el Arzobispo de Esztergom gozaba de privilegios extraordinarios,
lo que resultó en ser titulado Príncipe-primado. El primado era titulado para mantener sínodos nacionales,
era Legatus Natus de la Santa Iglesia Romana y por lo tanto tenía el derecho,
dentro de su legación (territorio en el que representaba al Papa), a llevar la
cruz portada delante de él, se ocupaba directamente de Roma y tenía
derecho de visitación
canónica en las sedes episcopales y las
casas religiosas en Hungría, con la excepción de la Archiabadía de Pannonhalma.
Desde 1715 el primado también había sido un Reichsfürst,
un príncipe gobernante del Sacro Imperio Romano,
titulado Príncipe Primado. Era el jefe y el canciller privado del reino húngaro, y por lo tanto
guardián del gran sello. Anteriormente
también era un miembro de la Corte Suprema y gobernador aún más antiguo, virrey
y Erbobergespan (Conde
Jefe 'hereditario') de Gran
(Condado Esztergom).
Kolos Ferenc Cardinal Vaszary (1832 - 1915), Arzobispo de Esztergom.
El primado también tenía el derecho de
supervisar la real casa de moneda en Kremnica, por la
que recibía una importante suma de sus ingresos, llamado jus
piseti ("derecho de'). Según antigua costumbre, tenía el
derecho a coronar al rey de Hungría y ungir a
la reina. Por una donación de
propiedad arzobispal fue capaz de conferir nobleza (Prädialadel),
otra rara prerrogativa principesca (por lo general sólo el nombramiento de caballeros se le permitía a la nobleza no soberana). Otro privilegio era su derecho a
prestar juramento ante un tribunal de justicia a través de su diputado y no
personalmente.
El primado
era también jefe sacerdote y canciller de la Orden nacional
húngara de San Esteban,
establecida en 1764. Como el primer caballero banneret (baro regni) de Hungría, era un magnate, es
decir, miembro de la Cámara Alta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario