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martes, 15 de junio de 2010

El Duque de Orléans

El Ducado de Orleans (en francés, Duché d'Orléans) es uno de los títulos más importantes de la nobleza francesa. Inicialmente fue un feudo francés, que sólo debió ser al principio un condado del imperio carlovingio. Cuando Carlos el Calvo volvió a formar los ducados, formaba parte del de Francia y era, por consiguiente, un sub-feudo de la Corona, pero volvió pronto a los duques. Roberto I (rey, o por lo menos competidor al trono, en 923) era conde de París y de Orleans, al mismo tiempo que duque de Francia.

Hugo el Grande y Hugo Capeto heredaron estos títulos, de modo que una misma persona poseía el feudo y los dos sub-feudos, que fueron las más sólidas bases del nuevo dominio real y del mismo poder real. El condado de Orleans no fue separado nunca de la Corona mientras reinó la línea directa de los Capetos, pero sí lo fue después con frecuencia:

1º - Felipe VI le erigió en ducado y se lo cedió a su cuarto hijo Felipe, que murió en 1375,
2º - Carlos V dio este título a su hijo segundo, Luis (1392), cuyo nieto, Luis XII, subió al trono en 1498 y lo reunió otra vez a los dominios de la Corona,
3º - Luis XIII lo separó de nuevo para su hermano Gaston, que no tuvo más que una hija (Mademoiselle),
4º - Entonces pasó al hermano de Luis XIV, Felipe I.


Carlos de Valois, Duque de Orleans (1394-1465)


El título de duque de Orleans se atribuía a algún príncipe de la familia real, los llamados princes du sang, por lo que constituía una línea secundaria en la sucesión al trono.

Durante el antiguo régimen, el titular del ducado era una figura política importante. Los Orleans subieron al trono con Luis XII en el siglo XV y Luis Felipe en el siglo XIX. Los descendientes de la familia son los pretendientes orleanistas al trono, y candidatos a él en caso de una restauración monárquica en Francia. El poseedor del título usaba el estilo de Alteza Serenísima.


Casa de Valois

Primera creación
  • 1344-1375: Felipe de Valois, duque de Orleans (1336 - 1376), hijo de Felipe VI de Francia.

Segunda creación
  • 1392 - 1407: Luis I de Orleans (1372 - 1407), hijo de Carlos V de Francia.
  • 1407 - 1465: Carlos I de Orleans (1391 - 1465), conde de Angulema
  • 1465 - 1498: Luis II de Orleans (1462 - 1515), rey de Francia como Luis XII desde 1498.


El Château de Blois, en el Valle del Loira, adquirido por Luis, Duque de Orleans y lugar de residencia de varios reyes franceses


Tercera creación
  • 1522 - 1545: Carlos II de Orleans (1522 - 1545) hijo de Francisco I de Francia.

Cuarta creación

  • 1549 - 1550: Luis III de Orleans (1549 - 1550) hijo del rey Enrique II de Francia, nombrado duque de Orleans desde su nacimiento.
  • 1550 - 1560: Carlos III de Orleans (1550 - 1574) hijo del rey Enrique II de Francia. Reinó como Carlos IX desde 1560.
  • 1560 - 1574: Enrique, duque de Orleans (1551 - 1589) hijo de Enrique II de Francia. Duque de Orleans desde 1560. Reinó como Enrique III sucediendo a su hermano Carlos IX.

Casa de Borbón

  • 1607 - 1611: Nicolás Enrique de Francia (1607-1611), hijo de Enrique IV de Francia.
  • 1626 - 1660: Gastón I (1608 - 1660) hijo de Enrique IV de Francia.

Marguerite de Lorraine, duquesa consorte de Orleans


Casa de Orleans
  • 1660 - 1701: Felipe I de Orleans (1640-1701) hijo del rey Luis XIII de Francia.
  • 1701 - 1723: Felipe II de Orleans (1674-1723), hijo del anterior y regente de Luis XV de Francia.
  • 1723 - 1752: Luis I de Orleans (1703-1752) hijo del anterior.
  • 1752 - 1785: Luis Felipe I de Orleans (1725-1785) hijo del anterior.
  • 1785 - 1793: Luis Felipe II de Orleans (1747-1793) hijo del anterior, renunció a su título en 1792, tomando el nombre de "Felipe Igualdad".
  • 1793 - 1830: Luis Felipe III de Orleans (1773-1850) hijo del anterior. Rey de los franceses desde 1830 como Luis Felipe I.
Luis Felipe, Duque de Orleans, llega a l’Hôtel de Ville en París (julio de 1830)

Título de la monarquía de julio


  • 1830 - 1842: Fernando Felipe de Francia (1810-1842) hijo del anterior.

Título de cortesía
  • 1894 - 1926: Luis Felipe Roberto, duque de Orleans.
  • 1960 (póstumo): Francisco de Orleans, hijo de Enrique de Orleans, conde de París
    desde 1969: Jaime de Francia, duque de Orleans.

Príncipe Jacques (Jaime) de Francia, duque de Orleans y su esposa, Gersende de Sabran-Pontèves (mayo de 2009)



viernes, 11 de junio de 2010

El Duque de Borgoña

El Ducado de Borgoña fue uno de los estados más importantes de la Europa medieval, independiente entre 880 y 1482. El feudo del Duque de Borgoña correspondía aproximadamente con la región actual francesa de Borgoña. Gracias a su riqueza y vasto territorio, el ducado fue tanto política como económicamente muy importante. Técnicamente eran vasallos del rey de Francia, pero los duques de Borgoña supieron mantener una política propia.

La dinastía inicial de los Duques de Borgoña se extinguió en 1026, con la muerte sin descendientes del heredero de la casa, el duque Otón Guillermo. Pero el ducado ya había sido anexionado en 1016 por Enrique I que se convirtió en duque en 1016. Enrique concedió el ducado a su hermano Roberto, que funda la rama de la Dinastía de los Capetos. De esta línea descendiente proviene Alfonso Enríquez, el primer rey de Portugal. El último representante de la casa fue Felipe de Rouvres, que murió de peste en 1361. El ducado pasó a la corona francesa.


Juan II El Bueno, al igual que habían hecho ya otros reyes de Francia, repartió el reino entre sus hijos, si bien mantuvo la unidad de la Corona. A Felipe el Valiente, su hijo menor, le concedió en 1363 el ducado de Borgoña. Felipe se casó con Margarita III de Flandes, la única heredera de este condado, que integraba asimismo los de Nevers y Rethel, por lo que este Valois-Borgoña acabó poseyendo una parte tanto del nordeste de Francia como de los territorios pertenecientes ya al Imperio. El duque llevó a cabo una eficaz política matrimonial con sus hijos, a Margarita la casó con el conde de Hainault y de Holanda, a Juan, su heredero, primero con la hermana de este conde y luego con la nieta del emperador Wenceslao de Luxemburgo y a Antonio, conde de Rethel, con la heredera de Luxemburgo.



Dijon: Tumba de los Duques de Borgoña (Jean Sans Peur o Juan I y Margarita de Baviera)


Entonces, el ducado de Borgoña se convirtió en un poderoso principado, de situación estratégica, con dos ramas autónomas: la de los dos Borgoñas y el Charoles y la de Flandes y Artois. El ducado fue apetecido tanto por Francia como por Alemania, que se lo disputaron violentamente. En 1419, al ser asesinado Juan sin Miedo en la lucha por el poder francés, le sucedió como duque de Borgoña su hijo Felipe el Bueno, quien más tarde fundaría la Orden del Toisón de Oro. La corte ducal borgoñona alcanzó un destacado florecimiento artístico y cultural y llegó a ser, por su pompa ceremonial, el modelo de etiqueta para las cortes europeas de esa época.


La fortaleza y prosperidad de Borgoña contrastaban con la decadencia de la dividida Francia de Carlos VII. Primero Felipe el Bueno y luego Carlos el Temerario lucharon contra los sucesivos reyes franceses, quienes les impedían crear un extenso imperio borgoñón, mayor aún al sumar los territorios de Alsacia y el Rin cedidos por Segismundo de Austria a cambio de su apoyo contra los rebeldes suizos.




El Palacio de los Duques de Borgoña en Dijon



El poderoso Carlos de Borgoña solicitó del emperador Federico III de Habsburgo el título de rey, pero este le exigió en contrapartida que la heredera de Borgoña, María, se casase con su hijo, el archiduque Maximiliano. Tras largas negociaciones El Temerario aceptó pero no consiguió su objetivo de ser nombrado rey y fue derrotado y muerto el 5 de enero de 1477 en el sitio de Nancy.


Entonces, toda Europa quería su parte en la sucesión que correspondía a María de Borgoña, la prometida de Maximiliano de Habsburgo. El rey de Francia Luis XI tomó la delantera y se apoderó de las dos Borgoñas, de Picardía, del Artois y de la comarca de Bolonia. María se quedó solamente con los Países Bajos.


Posteriormente, al morir la duquesa de Borgoña en 1482, su esposo Maximiliano I se vio obligado a negociar con el rey de Francia. El Tratado de Arrás dejaba a la Corona francesa la Borgoña y la Picardía, mientras que el Artois y el Franco Condado serían la dote de Margarita de Austria, hija de Maximiliano y de María de Borgoña, que se comprometió en matrimonio al futuro Carlos VIII de Francia. La Casa de Austria conservó los Países Bajos.


El principado que constituía el ducado de Borgoña había dejado de existir. Los Valois-Borgoña también se acabaron, pues su última descendiente, María, al casarse con Maximiliano fortaleció a los Habsburgo y se integró con ellos, desapareciendo su linaje. A sus hijos, Felipe “el Hermoso” y Margarita, se les apellidaría ya “de Austria”. Felipe, casado con Juana la Loca de Castilla, tendría dos hijos emperadores, Carlos V y Fernando I, quienes, por tanto, fueron nietos de María, la última duquesa de una Borgoña autónoma que fue una potencia europea.



Presentación del Armorial ecuestre del Toisón de Oro al duque Philippe de Borgoña



Los duques de Borgoña


Bosónidas

880 - 921 : Ricardo I el Justiciero, primer duque de Borgoña (creado por Luis III)

921 - 923: Raúl I, hijo del anterior. En 923, se convirtió en rey de Francia y cedió el ducado a su hermano.


923 - 952: Hugo el Negro, hermano del anterior.


952 - 956: Gilberto de Chalon.



Robertinos (Capetos)

956 - 965: Otón Enrique, hijo de Hugo el Grande, se casó con Gerberga de Chalon, hija heredera de Gilberto de Chalon.

965 - 1002: Enrique I el Grande, hermano del anterior.


1002 - 1004: Otón Guillermo, Conde palatino de Borgoña, nieto del anterior.



Dominio real (1004-1032)


Roberto II el Piadoso, rey de Francia, sobrino de Otón Enrique y de Enrique I, conquistó el ducado de Borgoña y lo incorporó al dominio real.


Le sucedió su hijo Enrique, quien para terminar la revuelta de su hermano Roberto, le otorgó el ducado de Borgoña, de forma similar a un infantazgo, en 1032 a cambio de renunciar sus pretensiones al trono francés, originándose así una rama menor de la dinastía capetina, la Casa de Borgoña.



La excomunión de Roberto el Piadoso (por haberse negado a anular el matrimonio con su prima hermana Berta de Borgoña)



Casa de Borgoña (Capetos)

1032 - 1076: Roberto I el Viejo, hijo de Roberto II el Piadoso y hermano de Enrique I.


1076 - 1079: Hugo I, nieto del anterior.


1079 - 1102: Eudes I Borrel, hermano del anterior.


1102 - 1143: Hugo II el Pacífico, hijo del anterior.


1143 - 1162: Eudes II, hijo del anterior.


1162 - 1192: Hugo III, hijo del anterior.


1192 - 1218: Eudes III, hijo del anterior.


1218 - 1272: Hugo IV, hijo del anterior.


1272 - 1306: Roberto II, hijo del anterior.


1306 - 1315: Hugo V, hijo del anterior.


1315 - 1349: Eudes IV, hermano del anterior.


1349 - 1361: Felipe I de Rouvres, nieto del anterior.



Dominio Real (1361 - 1363)


A la muerte prematura del duque Felipe I sin descendencia, le sucedió su primo Juan II el Bueno, rey de Francia, según la proximidad de sangre, ya que según primogenitura le hubiese correspondido a Carlos II de Navarra, pero la nobleza borgoñona también sopesó las alianzas e influencias de ambos en la Guerra de los Cien Años. En 1363, Juan II otorgó en infantazgo a su hijo Felipe.

Casa de Valois

1364 - 1404: Felipe II el Atrevido, hijo del rey de Francia Juan II;

1404 - 1419: Juan I Sin Miedo, hijo del anterior;

1419 - 1467: Felipe III el Bueno, hijo del anterior;

1467 - 1477: Carlos I el Temerario, hijo del anterior.



Philippe III le Bon



Después de 1477


Después de la muerte de Carlos el Temerario en la Batalla de Nancy sin descendencia masculina, el rey Luis XI se apoderó del ducado de Borgoña y lo anexionó al dominio real, en base a que los infantazgos se habían reglamentado de forma que al agotarse la descendencia masculina debían incorporarse a la Corona. Pero María, la hija de Carlos el Temerario, se casó con el futuro emperador Maximiliano I de Habsburgo para defender su herencia, y no aceptó la pérdida del ducado, manteniendo así la titulación de duque de Borgoña. Lo mismo hicieron sus descendientes los reyes de España, debido al prestigio que otorgaba a su titular el ser Gran Maestre y Jefe Soberano de la Orden del Toisón de oro. Tanto es así que en la Paz de Cambrai (1529) el emperador Carlos V renunciaba al territorio específico del ducado de Borgoña pero no al título.



Duques titulares de Borgoña (título Habsburgo)



Los Habsburgo continuaron reclamando el ducado de Borgoña, en vano, y reconocieron su pérdida -Paz de Cambrai (1529), Tratado de Cateau-Cambrésis (1559), tratado de Nimega (1678)-. Siguieron manteniéndose como duques titulares.



El matrimonio de Maximiliano I de Habsburgo y de María de Borgoña


1477 - 1482: María de Borgoña, hija de Carlos el Temerario, y esposa de Maximiliano I de Habsburgo, emperador del Sacro Imperio Romano Germánico.


1482 - 1506: Felipe IV el Hermoso, rey de Castilla, hijo de la anterior.


1506 - 1555: Carlos I, emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, rey de España, hijo del anterior.


1555 - 1598: Felipe II, rey de España y Portugal, hijo del anterior.


1598 - 1621: Isabel Clara Eugenia y Alberto de Austria, hija y yerno del anterior.


1621 - 1665: Felipe IV, rey de España y Portugal, sobrino de los anteriores y nieto de Felipe II.


1665 - 1700: Carlos II, rey de España, hijo del anterior. Tras la paz de Nimega, se desarticuló definitivamente la herencia territorial de los Valois borgoñones.


Los reyes de España como sucesores siguieron manteniendo la titulación como mero prestigio.



Duque de Borgoña (título francés)


Título del Antiguo Régimen


El título fue otorgado por el rey de Francia a los príncipes y a priori a los primogénitos del Delfín:

1682 - 1711: Luis de Francia (1682 - 1712), duque de Borgoña, hijo de Luis de Francia, llamado el Gran Delfín, y nieto de Luis XIV.

1751 - 1761: Luis de Francia (1751 - 1761), duque de Borgoña, primogénito de Luis de Francia, delfín, y nieto de Luis XV.




Luis de Francia (hijo de Luis XIV y de Maria Teresa de España), El Gran Delfín, y su esposa, Princesa María Ana de Baviera, con sus tres hijos: Luis, El Pequeño Delfín, Felipe (más tarde Felipe V de España) y Carlos (más tarde Duque de Berry).


Título de cortesía


1950 - 1975: Alfonso de Borbón, nieto de Jaime Enrique de Borbón (1908 - 1975), duque de Anjou y de Segovia, tomó de su padre el titulo de duque de Borbón y de Borgoña. En 1975, a la muerte de su padre, se adjudicó el título de duque de Anjou.

lunes, 11 de enero de 2010

Casa de Anjou-Valois


Títulos: Conde de Anjou, Conde de Provenza, Rey de Sicilia, Rey de Nápoles, Rey de Hungría, Rey de Polonia, Emperador de Constantinopla, Déspota de Epiro, Rey de Albania, Príncipe de Acaya

Historia

En 1203 Felipe II de Francia conquistó los territorios del rey inglés (entonces Juan I) en Francia, entre ellos el condado de Anjou, que pasó al patrimonio de la Corona. En 1246 Luis IX de Francia –San Luis- concedió los condados de Anjou y Maine a su hermano Carlos, que se convirtió en el fundador de la Segunda Casa de Anjou. Nombrado por la Santa Sede defensor de la Iglesia en Italia, fue coronado rey de Sicilia en San Juan de Letrán, en 1265.


Con los nietos de Carlos, la dinastía se dividió en varias ramas, cuyas posesiones y alianzas se extendieron rápidamente por Europa y tuvieron gran influencia durante la Edad Media hasta su extinción en 1434, llegando a gobernar no sólo Sicilia, sino también Nápoles, Hungría y Polonia. Incluía las ramas de Anjou-Sicilia, que reinó en Nápoles (1282- 1382), Anjou-Hungría, que gobernó Hungría (1308–1385, 1386–1395) y Polonia (1370–1399), Anjou-Tarento, que reinó sobre los remanentes del Imperio Latino (1313–1374) y Anjou-Durazzo, que gobernó en Nápoles (1382–1435) y Hungría (1385–1386).

El Condado de Anjou fue la dote de Margarita de Anjou y Maine, hija de Carlos II de Nápoles. Así, pasó a su marido Carlos de Valois. Al morir Carlos, el título pasó a su hijo Felipe, que se convertiría en Felipe VI de Francia. El condado volvía así, de nuevo, al patrimonio de la Corona.


Felipe VI, rey de Francia (1293-1350)

En 1356 Juan II de Francia concedió los condados de Anjou y Maine a su hijo Luis, que se convirtió en el fundador de la Tercera Casa de Anjou. En 1360 Anjou fue elevado a Ducado. Juana I de Nápoles adoptó a Luis para dejarle sus posesiones, pero a la muerte de la reina, Luis tuvo que luchar contra el otro pretendiente, Carlos (perteneciente a la rama Anjou-Durazzo), quien tras la muerte de Luis en 1384 pudo reinar efectivamente. Desde entonces, los descendientes de Luis fueron sólo Reyes titulares, excepto el breve reinado de Renato I.


La línea Anjou-Durazzo obtuvo el control de Nápoles pero la Casa de Anjou-Valois controlaba la segura Provenza y continuó peleando por el trono napolitano (Luis II gobernó Nápoles entre 1389 y 1399). La extinción de los Anjou-Durazzo en 1435 aseguró temporalmente el dominio de Nápoles a la línea mayor, pero fueron expulsados de allí por Alfonso V de Aragón en 1442. René de Anjou, el último duque de esta tercera línea angevina, murió en 1480, y Anjou revirtió a la corona francesa. Con la muerte de su sobrino el Duque de Maine en 1481, todas las posesiones angevinas, incluyendo Provenza, se fusionaron a la corona.


Luis II de Anjou, rey de Nápoles (1377-1417)

Reyes de Nápoles (Rama de Anjou-Sicilia)

En 1265 el papa Clemente IV concedió a Carlos de Anjou el Reino de Sicilia (y Nápoles), cuya corona ostentaban los Hohenstaufen, enemigos del papa por las luchas entre güelfos y gibelinos. El 26 de febrero de 1266, en la batalla de Benevento, el rey Manfredo de Hohenstaufen fue derrotado y muerto. Tras la batalla Carlos fue coronado rey de Sicilia. En 1282, ante la rebelión de los sicilianos, Anjou fue expulsado y Pedro III de Aragón fue coronado rey. Desde entonces, Carlos y sus descendientes sólo reinaron sobre Sicilia citerior (Nápoles). Sus títulos eran rey de Nápoles, de Sicilia y de Jerusalén, duque de las Pouilles, príncipe de Salerno, de Capua y de Tarento.

  • Carlos I (1282 - 1285)
  • Carlos II (1285 - 1309)
  • Roberto I (1309 - 1343)
  • Juana I (1343 - 1382). Su muerte provoca una guerra de sucesión entre su primo Carlos de Anjou-Durazzo y su hijo adoptivo Luis (perteneciente a la Tercera Casa de Anjou). Tras la muerte de Luis en 1384, Carlos se proclama Rey. Mientras, los descendientes de Luis se convierten en reyes titulares.
Blasones de Anjou-Sicilia-Jerusalén

Reyes titulares de Nápoles
  • Luis I (1382 - 1384)
  • Luis II (1384 - 1417)
  • Luis III (1417 - 1434)
  • Renato I (1434 - 1442)
  • Renato I (1435 - 1442)
  • Renato I (1442 - 1480)
  • Carlos IV (1480 - 1481). Muerto sin descendencia, los títulos pasan nuevamente al patrimonio de la Corona francesa.

Rama Anjou-Durazzo

La rama Anjou-Durazzo reinó sobre Nápoles tras la guerra de sucesión. Su fundador fue Juan I de Anjou, duque de Durazzo, hijo de Carlos II de Nápoles. Su nieto Carlos se convirtió en rey de Nápoles tras la muerte de Juana I.
  • Carlos III (II de Hungría) (1382 - 1386). Rey efectivo desde 1384
  • Ladislao I (1386 - 1414)
  • Juana II (1414 - 1435)
  • Juana II murió sin herederos, acabando con ella la rama Anjou-Durazzo. Nombró heredero a Renato (I) de Anjou, nieto del pretendiente Luis (I) y, por lo tanto, miembro de la Tercera Casa de Anjou.
Carlos de Anjou, III de Nápoles y I de Hungría (1345-1386)

Reyes de Hungría (Rama Anjou-Hungría)

Tras la muerte sin descendencia de Ladislao IV de Hungría en 1290, dos hombres se disputaron el trono: Andrés Árpád (tío segundo del rey) y Carlos Martel de Anjou (hijo de Carlos II de Nápoles y María de Hungría, hermana de Ladislao). Andrés se convirtió finalmente en rey, pero su muerte sin descendencia provocó que la corona recayese en Carlos Roberto, hijo de Carlos Martel de Anjou.

  • Carlos Martel (pretendiente)
  • Carlos I Roberto (1308 - 1342)
  • Luis I (I de Polonia) (1342 - 1382)
  • María I (1382 - 1385). Carlos III de Nápoles, de la rama Anjou-Durazzo, se proclama rey de Hungría en 1385, como pariente varón más cercano a Luis I. Es asesinado en 1386 por los partidarios de María I.
  • María I (1386 - 1395)
María, reina de Hungría, con su madre Elizabeth (de Bosnia), Reina Viuda de Hungría y Polonia, en cautividad (1386)

Reyes de Polonia

Tras la muerte sin descendencia de Casimiro III de Polonia en 1370, el trono es heredado por Luis I de Hungría.
  • Luis I (I de Hungría) (1370 - 1382)
  • Eduviges I (1382 - 1399)

Emperadores titulares del Imperio Latino (Rama Anjou-Tarento)

En 1313 Felipe de Anjou, príncipe de Tarento e hijo de Carlos II de Nápoles, se casó con Catalina de Valois-Courtenay, emperatriz titular del Imperio Latino.
  • Felipe I de Tarento (1313 - 1332), junto a su esposa Catalina (1308 – 1346)
  • Roberto de Tarento (1346 - 1364)
  • Felipe II de Tarento (1364 - 1373)
  • Jaime de Baux (1373 - 1383). Por ser hijo de Francisco de Baux, no pertenece directamente a la Casa de Anjou, pero fue sobrino de Roberto y Felipe II de Tarento. Tras su muerte, el título pasa a Luis de Anjou, pretendiente al trono de Nápoles y miembro de la Tercera Casa de Anjou, aunque ni él ni sus descendientes llegaron a usarlo.

Santa Sofía de Constantinopla, lugar de coronación de los emperadores del Imperio Latino (1910)

La rama principal de Anjou-Sicilia se extinguió en línea masculina con la muerte del rey Ladislao de Nápoles en 1414 y totalmente extinta con su hermana Juana II de Nápoles en 1434. Fabulosamente fecunda y activa, llegaría a totalizar, en toda su duración, 299 coronas soberanas y 12 beatificaciones.

jueves, 19 de noviembre de 2009

Casa de Valois

La Casa de Valois es una rama menor de la Dinastía de los Capetos que gobernó Francia entre los años 1328 y 1589. Una rama de los Valois reinó como Duques de Borgoña de 1363 a 1482. Eran descendientes de Charles de Valois, cuarto hijo de Philippe III de Francia.

La Dinastía Capetina parecía segura durante y después del reinado de Philippe IV. Éste dejó tres hijos sobrevivientes, los futuros Louis X, Philippe V y Charles IV, y una hija, Isabel de Francia. Cada hijo varón se convirtió en rey a su turno pero murieron jóvenes y sin herederos masculinos (todos tuvieron hijas mujeres). Cuando Charles IV murió en 1328, la sucesión a la Corona francesa estaba abierta.


Bajo la Ley Sálica, que sólo reconocía a la línea masculina, el trono pasaría a través de los descendientes masculinos de Charles de Valois. Philippe, hijo de éste, era el más cercano heredero masculino, nieto de Philippe III, sobrino de Philippe IV y primo de los tres hijos de éste. Irónicamente sería conocido como “El Afortunado” por su escasa oportunidad de convertirse en rey.

Los Valois directos

La polémica sucesión hizo posible la pretensión al trono de los reyes de Inglaterra -que a su vez eran los señores feudales más importantes en Francia-. Eso originó la Guerra de los Cien Años, en la que los Valois fueron derrotados en un principio, hasta que el territorio sobre el que gobernaban quedó reducido a una mínima expresión. El juego de alianzas del resto de casas nobles, como la Casa de Borgoña, independiente en la práctica, hizo el conflicto interminable.

Las campañas de Juana de Arco cambiaron las tornas de la guerra, que dejó como misión sagrada de la dinastía, teñida de providencialismo, reunir bajo su soberanía la multiplicidad de entidades en que estaba dividido el territorio entre el río Rin y los Pirineos. Con Luis XI de Francia ya se consigue un poder real compatible con lo que serán en el contexto europeo occidental las monarquías autoritarias.



Charles V de Valois (1338-1380)


Ya en el siglo XVI reinaba Francisco I (desde 1515 hasta 1547) sucesor de Luis XII, uno de cuyos logros fue fortalecer el poder real, así como derrotar a los suizos y firmar el tratado de Noyon que le daba derechos sobre el Ducado de Milán. También era uno de los candidatos al trono del Sacro Imperio Romano Germánico. Su hijo Enrique II de Francia se casa con Catalina de Médicis y tienen tres hijos varones, los futuros Francisco II, Carlos IX y Enrique III, quienes por su incapacidad de gobernar, dejan un papel destacado a su madre. En este contexto - y con la intervención de Felipe II de España- se desatan las Guerras de Religión, que acaban destruyendo a la dinastía.

Reyes de Francia

Valois

  • Philippe VI el Afortunado (1328-1350), hijo de Carlos de Valois y Margarita de Anjou
  • Jean II el Bueno (1350-1364)
  • Charles V el Sabio (1364-1380)
  • Charles VI el Bienamado, más tarde conocido como el Loco (1380-1422)
  • Charles VII el Victorioso (1422-1461)
  • Louis XI el Prudente (1461-1483)
  • Charles VIII el Afable (1483-1498)

Valois-Orléans

  • Louis XII el Padre de Su Pueblo (1498-1515)

Valois-Angoulême


  • François I (1515-1547)
  • Henri II (1547-1559)
  • François II (1559-1560)
  • Charles IX (1560-1574)
  • Henri III (1574-1589)


Con la aplicación de la Ley Sálica se produce la extinción de la línea Valois por el lado masculino y la Casa de Borbón asumió el trono como descendiente de Louis IX.


Henri III, Rey de Polonia entre 1573 y 1574 con el nombre de Henri de Valois (Henryk Walezy), y Rey de Francia entre 1574 y 1589.

Reyes de Polonia
  • Henry III de Francia (1573-1574)
Condes y Duques de Anjou (Casa de Valois-Anjou)
  • Louis I, duque (1360–1383), también rey de Jerusalén y Nápoles como Louis I, segundo hijo de Joan II de Francia
  • Louis II (1377–1417), también rey de Nápoles como Louis II
  • Louis III (1403–1434), también rey de Nápoles como Louis III
  • René I (1409–1480), también rey de Jerusalén y de Nápoles como René I
  • Charles IV (1436–1481)
Duques de Borgoña (Casa de Valois-Borgoña)
  • Philippe II el Calvo (1363–1404), cuarto hijo de Joan II de Francia
  • Joan II Sin Miedo (1404–1419)
  • Philippe III el Bueno (1419–1467)
  • Charles I el Calvo (1467–1477)
  • Marie I la Rica (1477–1482)
Duques de Brabante (Casa de Valois-Borgoña-Brabante)
  • Antoine I (1406–1415), segundo hijo de Philippe El Calvo de Borgoña
  • Joan IV (1415–1427)
  • Philippe I (1427–1430)

Escudo de armas de los Duques de Brabante y la dinastía de Borgoña


Condes de Nevers (Casa de Valois-Borgoña-Nevers)
  • Philippe II (1404–1415), tercer hijo de Philippe El Calvo de Borgoña
  • Charles I (1415–1464)
  • Joan II (1464–1491)

Condes y Duques de Alençon (Casa de Valois-Alençon)

  • Charles II, conde (1325-1346), segundo hijo de Charles de Valois
  • Charles III, conde (1346-1361)
  • Pierre II, conde (1361–1391)
  • Joan I, conde (1391–1414)
  • Joan I, duque (1414-1415)
  • Joan II, duque (1415-1424 y 1449–1474)
  • René I, duque (1478-1492)
  • Charles IV, duque (1492–1525)
Ramas ilegítimas

  • Casa de Valois-Dunois, condes de Longueville
  • Casa de Valois-Saint-Rémy, condes de Saint-Rémy

Château de los Duques d’Alençon (siglo XII)

miércoles, 16 de septiembre de 2009

Los Infantazgos franceses

  • Louis VI
    o El Condado de Dreux para su tercer hijo, Robert.

  • Louis VI Le Gros

  • Philippe II
    o Los Condados de Domfront y Mortain para su hijo menor Philippe Hurupel.


  • Louis VIII
    o El Condado de Artois para su segundo hijo, Robert. Artois fue perdido por los herederos masculinos de éste, pasando a la línea femenina y siendo heredado por los Duques de Borgoña. Louis XI se apoderó de él a la muerte de Carlos el Calvo en 1477 pero su hijo lo regresó a los herederos de Charles en preparación para su invasión de Italia en 1493.
    o Los Condados de Anjou y Maine a su tercer hijo, John. Estos títulos regresaron a la corona cuando John murió sin herederos en 1232.
    o Los Condados de Poitou y Auvergne a su cuarto hijo, Alphonse de Toulouse. Estos títulos regresaron a la corona cuando Alphonse murió sin herederos en 1271.


  • Louis IX
    o Los Condados de Anjou y Maine a su hijo menor, Charles I de Sicilia. Estos títulos pasaron a la nieta de Charles, quien casó con el conde de Valois, hijo menor de Philippe III de Francia, y luego a su hijo, Philippe. Cuando este último subió al trono como Philippe VI, los títulos fueron fusionados a la corona.
    o El Condado de Orléans a su hijo mayor, Philippe. Este título regresó a la corona cuando éste sucedió a su padre como Philippe III en 1270.
    o El Condado de Valois a su segundo hijo, Jean Tristan. Este título se extinguió a la muerte de Jean Tristan en 1270.
    o Los Condados de Alençon y Perche a su tercer hijo, Pierre. Este título se extinguió a la muerte de Pierre en 1284.
    o El Condado de Clermont-en-Beauvaisis a su cuarto hijo, Robert. El hijo de éste, Louis, fue nombrado más tarde Duque de Borbón, el cual fue considerado como un infantazgo, aunque técnicamente no lo era. Louis comerció Clermont para La Marche con su primo Charles, Conde de Angoulême, hermano menor del rey Philippe V. Estos títulos permanecieron con la familia Borbón hasta que fueron confiscados debido a la traición de Charles III, Duque de Borbón, en 1527.


  • Philippe III
    o El Condado de Valois a su segundo hijo, Charles. Éste recibiría más tarde los Condados de Alençon, Perche y Chartres de parte de su hermano, Philippe IV de Francia. A su muerte en 1325 Valois pasó al hijo mayor de Charles, Philippe, y regresó a la corona cuando Philippe subió al trono en 1328. Alençon y Perche pasaron al hijo menor de Charles, Charles II. Estos títulos regresaron a la corona luego de la extinción de la línea Alençon en 1525.
    o El Condado de Beaumont-sur-Oise a su tercer hijo, Louis. Éste obtuvo el Condado de Évreux de su hermano Philippe IV. Ambos títulos regresaron a la corona a la muerte de la reina Blanche de Navarra en 1441.


  • Philip IV
    o El Condado de Poitou para su segundo hijo, Philippe. Este título regresó a la corona cuando Philippe se convirtió en rey en 1316.
    o Los Condados de La Marche y Angoulême para su tercer hijo, Charles. Éste más tarde comerció La Marche para el Condado de Clermont-en-Beauvaisis con el Duque de Borbón. Estos títulos regresaron a la corona cuando Charles subió al trono como Charles IV de Francia en 1322.



  • Charles IV Le Bel

  • Philippe VI
    o El Ducado de Normandy para su hijo mayor, Jean. Este título regresó a la corona cuando Jean sucedió a su padre en 1350.
    o El Ducado de Orléans para su hijo menor, Philippe. Este título regresó a la corona cuando Philippe murió sin descendencia en 1375.


  • Jean II el Bueno
    o Los Ducados de Anjou y Maine a su segundo hijo, Louis de Nápoles. Este título regresó a la corona a la muerte del duque Charles IV de Anjou, bisnieto de Louis, en 1481.
    o Los Ducados de Berry y Auvergne a su tercer hijo, Jean. Estos títulos regresaron a la corona cuando Jean murió sin descendencia masculina en 1416.
    o El Ducado de Borgoña a su cuarto hijo, Philippe. A la muerte de su bisnieto, Charles el Calvo, en 1477, el rey Louis XI reclamó la devolución de Borgoña y se apoderó el territorio. Continuó siendo reclamado, sin embargo, por la hija de Charles, Marie, y sus herederos. Cuando el nieto de ésta, emperador Carlos V, derrotó y capturó a Francisco I en la batalla de Pavía en 1525, forzó al rey de Francia a firmar un tratado reconociéndolo como Duque de Borgoña, pero Francisco desautorizó el tratado cuando fue liberado y la cesión fue revocada por el Tratado de Cambrai cuatro años después. Charles y sus herederos reservaron sus reclamos y esta reservación fue repetida más tarde en el Tratado de los Pirineos en 1659, cuando Felipe IV de España continuó reservando sus derechos al Ducado.


  • Charles VI
    o El Ducado de Orléans y el Condado de Angoulême a su hermano Louis en 1392. El título regresó a la corona cuando el nieto de Louis se convirtió en Louis XII de Francia en 1498.



  • Charles IV en su boda con Marie de Luxemburg

  • Louis XI
    o Los Ducados de Normandy, Berry y Guyenne a su hermano menor Charles. Estos títulos regresaron a la corona cuando Charles murió en 1472.


  • François I
    o Los Ducados de Orléans, Angoulême y Châtellerault y los Condados de Clermont-en-Beauvaisis y La Marcha a su segundo hijo sobreviviente, Charles, en 1540. Fue agregado el Ducado de Borbón en 1544. Estos títulos regresaron a la corona cuando Charles murió sin descendencia en 1545.


  • Charles IX
    o Los Ducados de Anjou y Bourbonnais y el Condado de Forez al mayor de sus dos hermanos, Henri, en 1566. Fue agregado el Ducado de Auvergne en 1569. Los títulos regresaron a la corona cuando Henri sucedió a su hermano en 1574 como Henri III.
    o Los Ducados de Alençon y Château-Thierry y los Condados de Perche, Mantes y Meulan a su hermano menor, François, en 1566. Más tarde agregó el Ducado de Évreux y el Condado de Dreux en 1569. El otro hermano de François, Henri III, incrementó estas explotaciones en 1576, otorgándole los Ducados de Anjou, Touraine y Berry y el Condado de Maine. Todos estos títulos regresaron a la corona a la muerte de François sin descendencia en 1584.


  • Henri III

  • Louis XIII
    o Los Ducados de Orléans y Chartres y el Condado de Blois a su hermano menor Gaston en 1626. Fue agregado el Ducado de Valois en 1630. Estos títulos regresaron a la corona a la muerte de Gaston sin descendencia masculina en 1660.


  • Louis XIV
    o Los Ducados de Orléans, Chartres y Valois a su hermano, Philippe, en 1661. Le fue agregado el Ducado de Nemours en 1672. Estos títulos pasaron a sus descendientes y fueron abolidos durante la Revolución en 1790. Fueron restaurados al heredero, Louis Philippe III, en el momento de la Restauración, en 1814. Éste usurpó el trono en 1830 siguiendo a la Revolución de Julio y los títulos se fusionaron a la corona.
    o Los Ducados de Alençon y Angoulême y el Condado de Ponthieu a su tercer nieto, Charles, Duque de Berry, en 1710. Estos títulos regresaron a la corona a la muerte de éste sin descendencia sobreviviente, en 1714.

  • Louis Stanislas, Conde de Provenza


  • Louis XV
    o El Ducado de Anjou y los Condados de Maine, Perche y Senonches a su segundo nieto sobreviviente, Louis Stanislas, conde de Provence, en 1771. Recibió además el Ducado de Alençon de parte de su hermano Louis XVI en 1774. Estos títulos fueron abolidos durante la Revolución en 1790. Cuando la monarquía y los infantazgos fueron restaurados en 1814, Louis había heredado el trono como Louis XVIII y sus títulos se fusionaron a la corona.
    o Los Ducados de Auvergne, Angoulême y Mercoeur y el Vizcondado de Limoges a su nieto menor, Charles, conde de Artois, en 1773. Recibió además de parte de su hermano Louis XVI el Marquesado de Pompadour y el Vizcondado de Turenne. En 1776 Louis XVI privó a Charles de Limoges, Pompadour y Turenne y a cambio le dio los Ducados de Berry y Châteauroux, los Condados de Argenton y Ponthieu y el Señorío de Henrichemont. En 1778 el infantazgo fue remodelado, con Auvergne y Mercoeur removidos y reemplazados con el Condado de Poitou, dejando a Charles finalmente con los Ducados de Angoulême, Berry y Châteauroux, los Condados de Argenton, Ponthieu y Poitou y el Señorío de Henrichemont. Estos títulos fueron abolidos durante la Revolución y restaurados en 1814. Se fusionaron a la corona cuando Charles se convirtió en rey en 1824.

Aunque Napoleón restauró la idea del infantazgo en 1810 para sus hijos, ninguno les fue otorgado ni fueron creados nuevos infantazgos por los monarcas de la Restauración.

lunes, 14 de septiembre de 2009

Infantazgo

El infantazgo o infantado (en inglés: appanage) era la cesión de propiedades, títulos, oficios, pensiones u otros valores a los hijos varones más jóvenes de un soberano -quienes por el sistema de primogenitura no dispondrían de herencia- sirviendo también para desarrollar la administración aristocrática de sus territorios. Este sistema, muy común en la mayoría de Europa, influyó grandemente en la construcción territorial de Francia y los estados alemanes del Sacro Imperio Romano y explica el pabellón de muchas provincias de Francia.


Por extensión, el infantazgo también describe los fondos otorgados por el estado a ciertas familias reales.

La Ordenanza de los Molinos de 1566 hizo inalienables los predios regios, de tal manera que todos los infantazgos serían tarde o temprano devueltos a la Corona. El sistema fue abolido durante la Revolución francesa, siendo transitoriamente reestablecido entre 1810 y 1832.

El infantazgo original

Un infantazgo era una concesión de feudos por parte de un soberano a sus hijos más jóvenes mientras que el hijo mayor se convertía en rey a la muerte de su padre. Estas tierras no podían ser vendidas, ni hipotecadas, ni formar parte de una dote y volvían al dominio real ante la extinción de la línea principesca a la que se destinaban. Las hijas estaban excluidas de este sistema: una interpretación –hoy arcaica- de la ley sálica generalmente prohibía que las mujeres heredaran tierras y accedieran al trono.


El infantazgo era usado para dorar la píldora de la primogenitura y así evitar la guerra civil entre los pretendientes al trono o la división del reino entre príncipes de sangre real. Fue usado en este sentido en 843, por el Tratado de Verdún, cuando Luis el Pío dividió su imperio entre sus hijos Lothair y Luis el Germano. Esta división fue una fuente de antagonismo entre Francia y Alemania, desde que el tratado fue impuesto a Lothair por Luis.


Hugo Capeto, Rey de Francia (940-996)


Hugo Capeto fue electo Rey de Francia a la muerte de Luis V en 987. La línea real de Francia desde ese año al 1328 rompió totalmente con la costumbre merovingia y carolingia de dividir el reino entre todos sus hijos. El hijo mayor se convertía en rey y recibía el dominio real excepto para los infantazgos. La mayoría de los Capeto se esforzaron por aumentar el dominio real con la incorporación de feudos adicionales, grandes o pequeños, y así obtenían gradualmente el directo señorío de la mayor parte de Francia.


El rey Carlos V intentó eliminar el sistema del infantazgo, pero en vano. Provincias concedidas en infantazgo tendían a convertirse de facto en independientes y allí la autoridad del rey era reconocida a regañadientes. Teóricamente los infantazgos podían ser reincorporados al dominio real pero sólo si el último señor no tenía herederos masculinos. Los reyes trataron lo más posible de librarse de los más poderosos infantazgos: por ejemplo, Francisco I confiscó las Bourbonnais, el último infantazgo de importancia en aquel momento, después de la traición en 1523 de su comandante en jefe, Charles III, Duque de Borbón, el “condestable de Borbón” (muerto en 1527 al servicio del emperador Carlos V).



Francisco I de Valois, Rey de Francia (1494-1547)


El primer artículo del Edicto de Moulins (1566) declaraba que el dominio real (definido como toda la tierra controlada por la Corona por más de diez años) no podía ser enajenado, excepto en dos casos: para bloquear, en el caso de una emergencia financiera, con la perpetua opción de recomprar la tierra; y para formar un infantazgo, el cual podía regresar a la corona en su estado original ante la extinción de la línea masculina. El beneficiario de un infantazgo no podía separarse del mismo en ninguna forma.


Después de Carlos V de Francia, una clara distinción debía ser hecha entre títulos dados como nombres a los hijos de Francia y verdaderos infantazgos. A su nacimiento los príncipes franceses recibían un título independiente de un infantazgo. Así, el Duque de Anjou, hijo de Luis XIV, nunca poseyó Anjou y nunca recibió algún beneficio de esa provincia. El rey esperó hasta que el príncipe llegara a la edad adulta y fuera a casarse antes de beneficiarlo con un infantazgo. El cometido era proveerlo con suficientes ingresos como para mantener su rango real. El feudo otorgado en infantazgo podía ser el mismo que el título dado al príncipe, pero este no era necesariamente el caso.



Louis-Philippe d'Orléans, Rey de los Franceses (1773-1850)


Sólo siete infantazgos fueron otorgados entre 1515 y 1789. El sistema fue abolido en 1792 antes de la proclamación de la República y a partir de entonces los príncipes más jóvenes recibían dinero pero no territorios. Bajo el primer imperio Napoleón restableció los infantazgos, que fueron confirmados en la Restauración por el rey Luis XVIII. El último de los infantazgos, las Orléanais, fue reincorporado a la corona francesa cuando el duque de Orléans, Luis Felipe, se convirtió en rey de los franceses en 1830.

Infantazgos en Inglaterra

Los monarcas ingleses y más tarde británicos frecuentemente otorgaron infantazgos a sus hijos menores. Los más famosos fueron establecidos luego de la Guerra de las Dos Rosas cuando los Ducados de York y de Lancaster fueron otorgados a Edmundo de Langley y Juan de Gante, los hijos más jóvenes de Edward III.


James Stuart, Duque de York (1633-1701), futuro James II de Inglaterra

El título de Duque de York es el tradicional infantazgo del segundo hijo del monarca británico: desde 1716 hasta 1827 estuvo fusionado con el título de Duque de Albany. Todos los Duques de York desde su segunda creación en 1474 no han tenido herederos masculinos o no han asumido el trono.

Hubo otros infantazgos otorgados a varios miembros de la familia real.

Fuera de Europa Occidental

Los principados de Rusia occidental (en la frontera con Europa) tenían una práctica similar: un infantazgo otorgado al miembro masculino más joven de una familia real era llamado udel. La costumbre fue particularmente importante entre mediados del siglo XIII y mediados del XV, en lo que algunos historiadores llamaron “el período del infantazgo”.

En el subcontinente Indio, el jagir (una especie de feudo) era a menudo asignado a los parientes menores de la casa gobernante de un principado pero no como derecho de nacimiento –aunque en la práctica usualmente era hereditario- y no sólo a ellos sino también a plebeyos, normalmente como una cesión meritoria de tierras y derechos impositivos o incluso como parte de un negocio (garantizando un “ajuste” de ingresos, en lo que en sí mismo era influencia social).




Rajah Sir Tanjore Madhava Rao (1828-1891)

La línea femenina mayor en la Familia real de Travancore (India) tenía la propiedad de Attingal en infantazgo mientras vivieran. Todos los ingresos derivados de esta finca de 15.000 acres eran propiedad privada de la Maharani mayor, conocida también como Rani Mayor de Attingal (Attingal Mootha Thampuran).


La familia real del Imperio Mongol dominaba los más amplios infantazgos del mundo debido a sus extensas posesiones territoriales. En 1206, Genghis Khan dio vastos territorios con poblaciones a compartir con su familia y compañeros leales, de los cuales la mayoría tenían un origen común. Los botines de guerra eran distribuidos mucho más ampliamente. Emperatrices, princesas y funcionarios de mérito, así como hijos de concubinas, todos recibían importantes activos, incluyendo prisioneros de guerra.



Gengis Khan (1162-1227)

jueves, 16 de julio de 2009

La Alianza entre el Trono y el Altar

En la Edad Media, el hombre se hallaba inmerso en una época cristo-céntrica, en la que los Padres de la Iglesia se encargaban de transmitir al mundo la concepción de una sociedad cristiana universal.

La Cristiandad estaba sometida a dos poderes: el religioso, que era la Iglesia de Roma, encabezada por el Papa, y el secular, que era representado por un líder, el emperador o el monarca del país cristiano más importante. Para la Iglesia era necesario que el soberano fuese ungido, para que, como rey por la gracia de Dios, promoviese la justicia y la paz en la Cristiandad. De esta manera la Iglesia, como guardiana de la fe, se apoyaba en los reyes y los ungía para que guiasen a la Humanidad hac
ia su redención.




La Cristiandad como conjunto de países cristianos nació en el siglo IV, cuando el emperador converso Constantino hizo de ella la religión oficial del Estado y en el 325 convocó el primer concilio ecuménico, el de Nicea, presidido por el papa Silvestre I y al que asistieron representantes de todo el mundo civilizado. Entre los pueblos bárbaros fue el reino de los francos el primero que se cristianizó, al convertirse su rey Clovis (o Clodoveo) en el 496, le siguió el reino visigodo de Hispania en el 587. Con San Benito de Nursia la Cristiandad cobró realidad en el siglo VI, desarrollándose un tejido de monasterios en los que se preservó la fe, se transmitió la cultura clásica y se evangelizó de nuevo Europa, incluso mucho más allá del antiguo Imperio Romano.

En los siglos XII y XIII se alcanzó el apogeo de la Cristiandad. Fue un período de plenitud, de altos ideales y de inesperados prodigios, en el que la conquista de Jerusalén y el establecimiento de un reino y varios principados en Tierra Santa provocó un desbordamiento de alegría piadosa y una revitalización de la fe.



En aquella Europa existían monarcas fieles al Papa que se convirtieron en el brazo secular de la Iglesia Católica, en el marco de una permanente “alianza entre el trono y el altar”, a diferencia de los díscolos emperadores del Sacro Imperio Romano Germánico, que habían dejado de ser defensores de la Santa Sede. Al rey que recogió esta función protectora, para hacer sobrevivir el ideal profundo del Imperio, se le dio el título de Cristianísimo, como en el caso de los Capetos de Francia, o sencillamente Católico, como se calificó a los primeros reyes de la España unificada.

Los líderes cristianos de la realeza de Europa entre los siglos VIII y XVI se suceden durante treinta generaciones de diferentes dinastías: siete son Carolingios, cuatro Sajones, diez Capetos, cinco Valois, tres Habsburgos y los primeros reyes de la España unificada. Pero todos pertenecen a un solo linaje que desciende del enlace entre la Casa real de David en Occidente y la estirpe cristiana de Carlomagno. A lo largo de este período destacan cuatro soberanos como grandes protectores de la Iglesia, defensores de la Cristiandad en el exterior por medio de las armas y en el interior por la difusión de la fe: el carolingio Carlomagno, el sajón Otón III, el Capeto San Luis y el Habsburgo Carlos V.



De los emperadores a los reyes


En el año 800, el Papa León III coronó a Carlomagno, rey de los francos, como emperador de los romanos y líder secular de la Cristiandad, el que pasaba a sustituir en Occidente al emperador de los bizantinos o romano-orientales. Entonces, la Cristiandad pasó a replegarse a Europa occidental, en Roma y en Aix-la-Chapelle.



Los emperadores carolingios son:
- Pepín “el Breve”, Rey de los francos (742-768)
- Carlomagno, Emperador ( 742-814)
- Luis I “el Piadoso”, Emperador (778-840)
- Lotario I, Emperador (799-855)
- Luis II, Emperador (828-875)
- Carlos III “el Gordo”, Rey de Francia, Emperador (839-887)
- Arnulph I, Rey de Alemania, Emperador (863-899)





Emperador Carlomagno


En la segunda mitad del siglo IX, la institución imperial se encontraba ya en crisis, a la vez que el propio linaje carolingio se deshacía en luchas fratricidas. En cambio, emergían poderosos los Robertinos en Francia y los Sajones en Alemania. Ante ello, el Papa de Roma, que no podía ampararse en los cada vez más débiles carolingios, comenzó a recurrir a estas familias para la defensa de los intereses pontificios en particular y cristianos en general.






Los emperadores sajones son:
- Enrique I “el Pajarero”, Rey de Alemania, Emperador (875-936)
- Otón I, Rey de Alemania, Emperador (912-973)
- Otón II, Rey de Alemania, Emperador (953-983)
- Otón III, Rey de Alemania, Emperador (… -1002)




Otón III de Alemania
Otón III aunó en su personalidad la orientación de los dos Imperios, el Occidente y el Oriente: su fin era reunir los distintos países para constituir un imperio universal fundado en el orden cristiano. Pero al morir sin hijos en plena juventud, se registra un cambio de dinastía. Esto no implica una ruptura del linaje elegido: en los Capetos franceses convergen las tres ramas principales de la estirpe davídico-carolingia, por lo que se consideran los sucesores suyos con prioridad sobre otros descendientes, siendo Francia entonces la hija predilecta de la Iglesia.



Los reyes Capetos franceses son:
- Roberto II “el Piadoso”, Rey de Francia (972-1031)
- Enrique I, Rey de Francia (1005-1060)
- Felipe I, Rey de Francia (1052-1108)
- Luis VI, Rey de Francia (1077-1137)
- Luis VII, Rey de Francia (1120-1180)
- Felipe II “Augusto”, Rey de Francia (1165-1223)
- Luis VIII, Rey de Francia (1187-1226)
- Luis IX, Rey de Francia (1215-1270)
- Felipe III, Rey de Francia (1245-1285)
- Felipe IV “el Hermoso”, Rey de Francia (1268-1314)


San Luis de Francia


El cruel enfrentamiento de Felipe IV con el Papa Bonifacio VIII hasta la muerte del Pontífice, así como la destrucción de la Orden del Temple durante su reinado, convierte al monarca francés en maldito y provoca la extinción de la dinastía en 1328. Entonces se produce el advenimiento de los Valois, rama segundogénita de los Capetos y la preferencia divina se traslada al nuevo rey elegido, su sobrino Felipe VI, hijo de Carlos de Francia, conde de Valois.





Los reyes Valois son los siguientes:
- Felipe VI, Rey de Francia (1293-1350)
- Juan II “el Bueno”, Rey de Francia (1319-1364)
- Carlos V “el Sabio”, Rey de Francia (1338-1380)
- Carlos VI “el Loco”, Rey de Francia (1368-1422)
- Carlos VII, Rey de Francia (1403-1461)


Felipe VI de Francia


El abandono por parte de Luis XI, hijo y sucesor de Carlos VII, de los valores morales y de los principios en que se habían fundamentado los Capetos y los Valois, provocó su rechazo como rey elegido para liderar la Cristiandad. La Santa Sede se volvió hacia el nuevo Reino de España, concediendo a Fernando de Aragón e Isabel de Castilla el título de Católicos, con lo que se les reconocía como brazo secular de la Iglesia romana en agradecimiento a la recuperación de la totalidad de España para el cristianismo y a la obra evangelizadora española que se iniciaba en América.




Los últimos monarcas elegidos son:
- Los “Reyes Católicos” de España,
· Fernando de Aragón (1452-1516)
· Isabel de Castilla (1451-1504)
- Maximiliano I de Austria, Emperador (1459-1519)
- Felipe II, Rey de España (1527-1598)




Felipe II de España