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miércoles, 2 de febrero de 2011

Austria est imperium optime unita

Federico III de Habsburgo, Sacro Emperador Romano desde 1440, fue quien hizo realidad su monograma AEIOU (“Austria domina el mundo entero”) cuando declaró el ducado de Austria indivisible y comenzó una política de hábiles alianzas y reivindicación de sucesiones que convirtió los nombres de Austria y Habsburgo en sinónimos durante casi seis siglos y medio.

AEIOU o A.E.I.O.U o, era una divisa simbólica utilizada por los emperadores de aquella dinastía. Federico III tenía una afición por las fórmulas míticas, firmando habitualmente edificios y objetos con esas siglas, aunque no explicó su significado en el momento. Poco antes de su muerte afirmó (en alemán) que "Alles ist Erdreich untertan Österreich" o "Todo el mundo es súbdito de Austria." Sin embargo otras interpretaciones se han propuesto, asumiendo que eran un eslogan político, a partir de frases en latín:
  • Austria est imperium optime unita (Austria es el imperio más unido).
  • Austria erit in orbe ultima (Austria será la última (sobreviviente) en el mundo).
  • Austriae est imperare orbi universo (Es el destino de Austria gobernar el mundo entero).
  • Austria est imperatrix omnis universi (Austria es la emperatriz de todo el universo).

Orígenes de Austria

En tiempos antiguos, la tierra de Europa central que es ahora Austria fue ocupada antes de la romanización por diversas tribus celtas. Estuvo habitada inicialmente por ilirios, a los que más tarde se sumarían celtas procedentes del norte. El reino celta de Noricum fue reivindicado por el Imperio romano como provincia. A partir del año 15 a. C. pasó a ser una provincia del Imperio romano. Después de la caída de éste, la zona fue invadida por los bávaros, eslavos y ávaros.

Carlomagno recibiendo la sumisión del rey sajón Widukind (785)


Durante el Periodo de las grandes migraciones, los eslavos emigraron a los Alpes, mezclándose con la población celto-románica, y establecieron el reino de Karantania, que abarcaba gran parte del territorio austríaco del este y central. Mientras, la tribu germánica de los bávaros y los alamanes se mezclaron con la población retorrománica. Bajo la presión de los ávaros, Karantania perdió su independencia ante Baviera en 745 y pasó a ser un margraviato. Durante los siglos siguientes, los asentamientos bávaros descendieron por el Danubio y ascendieron por los Alpes, un proceso por el cual Austria pasó a ser el país de habla germana que es hoy en día.

Los bávaros pasaron a estar bajo el control de los Carolingios y, en consecuencia, formaron un Ducado del Sacro Imperio Romano Germánico. El Duque Tasilón III de Baviera, que quería mantener la independencia bávara, fue derrotado y el poder pasó a Carlomagno en 788. Carlomagno conquistó la zona y alentó a la colonización y el cristianismo. Como parte oriental del reino franco, los principales ámbitos que ahora abarcan Austria fueron legados a la Casa de Babenberg. La zona era conocida como la Marchia Orientalis y fue entregada a Leopoldo I de Austria en 976.

El primer vestigio con el nombre de Austria es de 996, en el que está inscrito como Ostarrîchi, refiriéndose al territorio de la marca de los Babenberg. El término occidental "Austria" no es históricamente determinado, aunque, al parecer, es una traducción de Marchia orientalis, que sólo llegó mucho más tarde.

Primera aparición de la palabra ostarrichi (rodeada de un círculo rojo). La moderna Austria honra este documento, datado en 996, como el fundador de la nación.


En la Edad Media, el Imperio carolingio se estableció en la región. Desde el siglo X al XIII Austria estuvo bajo el dominio de los Babenberg, que fueron sucedidos por la casa de los Habsburgo, cuya historia a partir de este momento y hasta el final de la Primera Guerra Mundial se funde con la de Austria.

Los siguientes siglos se caracterizan en primer lugar por la conformación del país. En 1156 el Privilegium Minus Austria eleva al territorio a la categoría de ducado. En 1192, la familia Babenberg también adquirió el ducado de Estiria.

Con la muerte de Federico II en 1246, la línea Babenberg se extinguió. Otakar II de Bohemia controló efectivamente la Prusia de Austria, Estiria y Carintia. Su reinado llegó a su fin al ser derrotado en Dürnkrut por Rodolfo I de Habsburgo en 1278. De allí en adelante, hasta la Primera Guerra Mundial, Austria fue en gran parte la historia de su dinastía gobernante, los Habsburgo.

El pavo real Habsburgo


La era Habsburgo

En los siglos XIV y XV, los Habsburgo empezaron a acumular otras provincias en las proximidades del Ducado de Austria. En 1438, el duque Alberto V de Austria fue elegido como sucesor de su suegro, el emperador Segismundo. Aunque el propio Alberto sólo reinó durante un año, a partir de entonces todos los emperadores del Sacro Imperio Romano fueron Habsburgo, con una sola excepción.

Asimismo, los Habsburgo comenzaron a acumular territorios lejos de sus tierras hereditarias. En 1477, el archiduque Maximiliano, hijo único del emperador Federico III, se casó con la heredera de Borgoña y, por lo tanto, adquirió la mayor parte de los Países Bajos para la familia. Su hijo Felipe el Hermoso, casado con la heredera de la Corona de Castilla y de Aragón, amplió las posesiones territoriales de los Habsburgo, sobre todo de los españoles. En 1526, a raíz de la batalla de Mohács, los gobernantes de Austria ampliaron sus territorios, con lo que la parte de Bohemia y de Hungría no ocupada por los otomanos quedó bajo su dominio. La expansión otomana en Hungría dio lugar a frecuentes conflictos entre los dos poderes, particularmente evidente en la llamada Guerra Larga de 1593 a 1606.

Federico III de Habsburgo y los blasones de sus dominios


En los siglos XVII y XVIII los Habsburgo ampliaron enormemente sus territorios ante la descomposición del poder otomano (1699 y 1718) y los repartos de la herencia de España (1713-1714) y de Polonia (1772 y 1795). Los reinados de María Teresa (1740-1780) y de su hijo José II (1765-1790) fueron un período de gran desarrollo social y político en la monarquía (abolición de la servidumbre, libertad de culto, abolición de la tortura, reformas administrativa y judicial, centralización administrativa, etc.) dentro del espíritu del Despotismo Ilustrado.

Las guerras napoleónicas fueron una dura prueba para la supervivencia de la monarquía, se disolvió el Sacro Imperio y se creó el Imperio austríaco, de menores dimensiones, pero la victoria reforzó a los Habsburgo, que con su canciller Metternich se convirtieron en los garantes de la restauración (1815-1848). El surgimiento de los nacionalismos y las derrotas exteriores entre 1848 y 1866, que la alejaron definitivamente de Alemania, llevaron a la reorganización de la monarquía, naciendo el Imperio austrohúngaro que ocuparía el último período de la monarquía de los Habsburgo (1867-1918). Este período estuvo caracterizado por los problemas políticos entre las diversas nacionalidades, pero también por un gran desarrollo económico y social y un mayor desarrollo aún en el ámbito de la cultura.


El Emperador José II y su hermano menor, Leopoldo, Gran Duque de Toscana, quien más tarde lo sucedería como Leopoldo II (1769)


La República de Austria

En 1918, tras la derrota en la Gran Guerra y la desmembración del Imperio, se crea la República de Austria Alemana que abarcaba todas las regiones de lengua alemana, siendo modificada por los vencedores de la I Guerra Mundial en el Tratado de Saint-Germain-en-Laye y convirtiéndose en la República de Austria, que abarcaba solo la mitad de la población germánica, una república parlamentaria, que tuvo una vida caracterizada por la permanente crisis económica, política y social. En 1934, el canciller Engelbert Dollfuss estableció una dictadura conservadora, el Austrofascismo, que no pudo hacer frente al empuje anexionista de la Alemania nazi.

Austria fue anexionada por el Tercer Reich en 1938 (el Anschluss) pasando a ser el Ostmark dentro de la Alemania Nazi. Tras la derrota de los nazis, las fuerzas aliadas ocuparon Austria al final de la Segunda Guerra Mundial hasta 1955, año en que el país volvió a ser plenamente independiente con la condición de que permaneciera neutral. Tras el colapso del comunismo en la Europa del Este, Austria incrementó su participación en los asuntos europeos. En 1995 se convirtió en miembro de la Unión Europea y en 1999 adoptó el sistemCursivaa monetario europeo.


Bandera del Estado austríaco (insignia de guerra)

4 comentarios:

  1. pienso que el gobierno debe reformar la constitucion y colocar a la monarquia en artículos en la constitucion por referendun para asi tener un pais perfecto

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  2. pienso que todos los paises del mundo deberían tener sus monarquias para progresar.

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  3. ¡Hola! soy nuevo por aquí.

    Siempre he sentido un gran interés por la casa de los Habsburgo, quizás la más poderosa dinastía en Europa, en donde sus dominios jamás se ponía el Sol.

    Esperamos nos presente una nueva entrada, en breve.

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  4. Austria fue un Imperio represor que siempre necesito la ayuda de otros para aplastar los nacionalismos, Austria perdio TODAS las guerras que inicio, al final, ese sicopara llamado Francisco Jose, no supo, no quiso, cambiar la estructura del imperio por aferrarse a unas politicas que ya estaban superadas, resultado??, el derrumbe estrepitoso del Imperio Austro-Hungaro y el hundimiento de Austria a un status de pais de muy segundo orden

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